Nuestra vida esta marcada por momentos de coraje y valentia

Hoy más que nunca reflexiono acerca de mi vida y llego a la conclusión de que la he construido a punta de fracasos, aprendizajes, derrotas, coraje y mucha valentia. Si... valentia!, esos momentos donde tomas la acción de hacer un cambio radical en tu vida o experimentar algo que te saca de tu conformismo y zona de confort al costo que sea, sin ningún temor y sin pensar en consecuencias. Simplemente sientes la valentia de hacerlo y ya esta!

Pues hoy quiero compartirles un momento de valentia que me marco personalmente. Sucedió en Enero de 2010, pero aun lo recuerdo como si fuera ayer;

¿Que sienten los vendedores en los semaforos?... APRENDI

Viernes 4PM. Vamos caminando con mi amiga desde la 5 con 79 hacia la Calle 7 con la idea de aprender una experiencia nueva en el camino. Derrepente nos encontramos finalizando el parque y vemos unos vendedores ambulantes de flores. ¿Como se llaman las flores?¿Cuanto cuestan?¿De donde vienen?... ¿Nos enseñan a venderlas?

Sonrisas van, sonrisas vienen, pero en el camino hacia el semáforo mis piernas tiemblan. ¿Cuanta es nuestra ganancia? ¿sugerencias? Y.. ¿si algún conocido me ve?..¿Que pensara?
Mi amiga se ha lanzado al agua, yo sonrió nervioso desde la distancia.

Miedos? pendejada? temores?... todo quedo atrás y ha llegado mi turno.

Semáforo, tras semáforo, solo sonrió tras cada ventana e invito a un juego.. Si adivina como se llaman; le regalo una de estas. Si adivina de donde vienen, le regalo media de aquella. Nadie Gano. Se llamaban Briselias provenian del Brasil :)

Luego de 10 minutos nuestra "patrona" se acerca y nos dice que no nos preocupemos, que todo es paciencia en la vida, que en buen día se pueden vender dos paquetes de flores.

...Mi esperanza de vender algo se derrumba y continúan los semáforos, semáforos y semáforos. Nadie compra, algunos sonríen, otros pasan indiferentes...

Dos minutos antes de marcharnos definitivamente, sucede un milagro, se detiene una camioneta. ¿Cuanto cuestan?..pregunto
Ella no quiso jugar a adivinar, quería comprar;

-$12.000 le digo.
-Muy caras, Gracias. Responde.
-Oye, te las dejo en $10.000
-Ok, dame las que veas mas grandes.

Me invade la felicidad y no reviso el dinero. Mi amiga toma la foto y nos marchamos felices.

Nuestra primera y única venta nos tomo 28 minutos

Aparece de nuevo nuestra "patrona" y nos felicita.

Pero nuestra clienta nos ha robado, me ha entregado menos dinero. Respondemos por 8.000 como acordamos con nuestra "patrona" que nos ha confiado y enseñado su trabajo.

Y nos queda como ganancias $1.000 pesos, como recuerdo de que hay que vencer los miedos y pendejadas. Como recuerdos de que debemos colocarnos en los zapatos de los demás para entender su realidad. Como recuerdos de que los vendedores de la calle son unos guerreros para admirar, como recuerdos de que nadie es digno de despreciar.
CAMJIM

La recompensa de una buena acción está en haberla hecho. CAMJIM