Hace algunos meses asiste al foro AIESEC 50 años. Para quien no conozca AIESEC "es la plataforma internacional para que los jóvenes descubran y desarrolle su potencial de tener un impacto positivo en la sociedad” como ellos mismos se definen. En este foro presencie grandes ponencias, conocí al hijo del ministro de hacienda, David Zuluaga, quien a pesar de no tener más de 18 años manejo a la perfección un auditorio con mas de 800 personas, y quien varios meses después ha ingresado a la universidad de Harvard para iniciar estudios políticos, no me sorprendería saludarlo en mi adultes y verlo como candidato a la presidencia de Colombia, su visión y capacidad intelectual es de admirar.
Pero bueno, el anterior no es el motivo de este post, realmente a lo que quiero llegar con el titulo de esta entrada es el reconocer que muchas veces olvidamos e ignoramos nuestra vos interior, después de asistir a este foro se me ha quedado en la cabeza una situación que la he presenciado constantemente hasta el punto de tomarme el tiempo para redactar esta entrada.
Finalizando la ponencia de Gunter Pauli y tras dejar a un auditorio impresionado e inspirado por la admirable ponencia de este personaje, varios jóvenes acudieron a los micrófonos con la intención de sacarle a Gunter "La receta del éxito". Luego de escuchar varias preguntas y compartir mi punto de vista con un compañero que se encontraba a mi costado derecho, este pronuncia algo que ha retumbado en mi cabeza por mucho tiempo... "La mayoría de los jóvenes no hacemos más que buscar respuestas mágicas a lo desconocido", y esta en todo lo correcto, pienso que la humanidad tiende a dejarse llevar por los sentidos, no hacemos más que buscar las soluciones y respuestas fuera de nosotros, lo que es totalmente razonable, pues somos personas totalmente sensoriales y aprendemos constantemente através de la vista, los sonidos, los gustos, las emociones y las formas, tanto así que percibimos sentidos desde el vientre materno, pero esto no puede limitarnos a olvidar nuestro instinto, nuestra vos interior, y es que he aprendido con el paso del tiempo de que las mejores respuestas las encuentras en ti mismo mediante la autorreflexión. Esto no es nuevo, grandes filósofos discutían sobre esto, también es conocido como el método socrático, que según Wikipedia supone la idea de que la verdad está oculta en la mente de cada ser humano: se le preguntaba al interlocutor acerca de algo y luego se procedía a rebatir esa respuesta por medio del establecimiento de conceptos generales.
Recuerdo hace un tiempo cuando funde una empresa que siempre intentaba recostar mis debilidades en las respuestas de otras personas, pedía consejos, orientación, en pocas palabras quería que planificaran el futuro d mi empresa por mi, pero me estrelle y muy fuerte, con el paso del tiempo entendí que las mejores respuestas estaban ocultas en la mente de cada persona, las situaciones mas confusas son solo un espejo a las confusiones internas que libramos constantemente, aprendí a buscar primero la calma y las soluciones en mi mismo, para luego recurrir a los “consejos” de los demás. Aunque no tengo certeza de que este en lo cierto lo único de lo que si puedo estar seguro es que a mi me resulta y he logrado los mejores resultados.
Pero bueno, el anterior no es el motivo de este post, realmente a lo que quiero llegar con el titulo de esta entrada es el reconocer que muchas veces olvidamos e ignoramos nuestra vos interior, después de asistir a este foro se me ha quedado en la cabeza una situación que la he presenciado constantemente hasta el punto de tomarme el tiempo para redactar esta entrada.
Finalizando la ponencia de Gunter Pauli y tras dejar a un auditorio impresionado e inspirado por la admirable ponencia de este personaje, varios jóvenes acudieron a los micrófonos con la intención de sacarle a Gunter "La receta del éxito". Luego de escuchar varias preguntas y compartir mi punto de vista con un compañero que se encontraba a mi costado derecho, este pronuncia algo que ha retumbado en mi cabeza por mucho tiempo... "La mayoría de los jóvenes no hacemos más que buscar respuestas mágicas a lo desconocido", y esta en todo lo correcto, pienso que la humanidad tiende a dejarse llevar por los sentidos, no hacemos más que buscar las soluciones y respuestas fuera de nosotros, lo que es totalmente razonable, pues somos personas totalmente sensoriales y aprendemos constantemente através de la vista, los sonidos, los gustos, las emociones y las formas, tanto así que percibimos sentidos desde el vientre materno, pero esto no puede limitarnos a olvidar nuestro instinto, nuestra vos interior, y es que he aprendido con el paso del tiempo de que las mejores respuestas las encuentras en ti mismo mediante la autorreflexión. Esto no es nuevo, grandes filósofos discutían sobre esto, también es conocido como el método socrático, que según Wikipedia supone la idea de que la verdad está oculta en la mente de cada ser humano: se le preguntaba al interlocutor acerca de algo y luego se procedía a rebatir esa respuesta por medio del establecimiento de conceptos generales.
Recuerdo hace un tiempo cuando funde una empresa que siempre intentaba recostar mis debilidades en las respuestas de otras personas, pedía consejos, orientación, en pocas palabras quería que planificaran el futuro d mi empresa por mi, pero me estrelle y muy fuerte, con el paso del tiempo entendí que las mejores respuestas estaban ocultas en la mente de cada persona, las situaciones mas confusas son solo un espejo a las confusiones internas que libramos constantemente, aprendí a buscar primero la calma y las soluciones en mi mismo, para luego recurrir a los “consejos” de los demás. Aunque no tengo certeza de que este en lo cierto lo único de lo que si puedo estar seguro es que a mi me resulta y he logrado los mejores resultados.
El que busca la verdad corre el riesgo de encontrarla.
Manuel Vicent
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